
¿Cada cuánto tiempo conviene cambiar de smartphone? Claves para alargar su vida útil
Expertos recomiendan mantener el dispositivo al menos cinco años, con cuidados adecuados y reparaciones oportunas, para reducir costos y el impacto ambiental.
Decidir cuándo reemplazar un teléfono móvil no solo afecta al bolsillo, sino también al medioambiente. Según un informe de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), estos aparatos están diseñados para funcionar correctamente durante un mínimo de cinco años, siempre que reciban el mantenimiento apropiado.
El talón de Aquiles: las baterías
El estudio destaca que la autonomía es el componente más vulnerable de los dispositivos. Las baterías de ion de litio, presentes en la mayoría de los modelos, se degradan progresivamente debido a las reacciones químicas internas durante los ciclos de carga.
"Antes, los usuarios podían sustituirlas por sí mismos, pero hoy, el proceso es más complejo y costoso", explica la OCU. Para combatir esta problemática, la Unión Europea implementó una normativa de ecodiseño, que exige a los fabricantes garantizar que las baterías conserven al menos el 80% de su capacidad tras 1.000 ciclos (equivalente a unos cinco años de uso).
Software: otro factor clave
Además de la parte física, la obsolescencia programada también está ligada a las actualizaciones del sistema operativo. La nueva legislación europea obliga a las marcas a ofrecer soporte técnico y parches de seguridad durante cinco años desde el lanzamiento del último modelo de cada serie.
¿Reparar o comprar uno nuevo?
Si el equipo presenta fallos aislados —como una pantalla rota o un puerto de carga defectuoso—, la reparación es la opción más sostenible y económica. No obstante, la OCU advierte:
⚠ "Intentar arreglarlo por cuenta propia puede anular la garantía y causar daños irreversibles".
Algunas empresas, como Apple, han impulsado programas de autorreparación, donde los usuarios acceden a repuestos originales y guías técnicas. Sin embargo, el proceso suele ser complejo y no siempre rentable.
Consejos para prolongar su vida útil
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Batería: Evitar cargarla al 100% de manera constante y no exponerla a temperaturas extremas.
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Protección física: Usar fundas y cristales templados para prevenir daños por golpes.
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Optimización: Eliminar aplicaciones en desuso, archivos redundantes y reiniciar el dispositivo periódicamente.
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Mantenimiento: Limpiar los puertos y actualizar el software regularmente.
Alternativas antes de descartarlo
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Donarlo o venderlo: Si aún funciona, puede ser útil para otro usuario. ¡Siempre borrando los datos personales!
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Reciclaje: Si está inutilizable, llevarlo a un punto limpio autorizado para evitar la contaminación por metales pesados.
En síntesis, con un uso consciente y reparaciones a tiempo, un smartphone puede superar los cinco años de vida, reduciendo gastos y la huella ecológica. La clave está en evaluar su estado real antes de tomar una decisión.
¿Tu móvil cumple estos requisitos? La próxima vez que pienses en renovarlo, considera estas recomendaciones.