Paro nacional y crisis presupuestaria en universidades
La secretaria general del Sindicato de Docentes Universitarios de la UNTDF, Nidia Benítez, analiza la crítica situación presupuestaria de las universidades públicas y el impacto de las recientes decis
La secretaria general del Sindicato de Docentes Universitarios de la UNTDF, Nidia Benítez, analiza la crítica situación presupuestaria de las universidades públicas y el impacto de las recientes decisiones políticas. Anuncia un paro nacional de docentes y no docentes, y advierte sobre las posibles consecuencias de los ajustes.
La crisis presupuestaria en las universidades públicas ha llegado a un punto crítico. Nidia Benítez, Secretaria General del Sindicato de Docentes Universitarios (SDU) de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego (UNTDF), anunció un paro que se realizará en conjunto con todo el personal técnico-administrativo, previsto para mañana. "La verdad que era esperable, con la información que se venía manejando en las últimas horas", explicó Benítez en FM La Isla sobre el veto político que aceleró la decisión del sindicato.
El paro no será una medida aislada, ya que mañana se reunirá el Frente Sindical en Buenos Aires, que aglutina a distintas federaciones de universidades, para definir el plan de lucha de la próxima semana. "Sabíamos que el panorama venía complicado y, aunque el paro puede finalizar pronto, las tensiones seguirán", afirmó la dirigente, haciendo referencia a la compleja situación que enfrentan las universidades ante la reducción de presupuestos y la incertidumbre sobre el futuro.
Además de la convocatoria a huelga, las universidades han sido escenario de tomas por parte de sectores estudiantiles. Benítez destacó que desde el sindicato de la UNTDF se convocó a toda la comunidad universitaria a participar de una asamblea esta noche, con el objetivo de debatir la posibilidad de una toma o de nuevas medidas de acción. "Nos parece fundamental definir entre todos los pasos a seguir", enfatizó. La reunión se realizará a las 19 horas, momento clave para asegurar la mayor participación de estudiantes y docentes.
El contexto económico no solo ha afectado a las universidades en términos de financiamiento para la continuidad de programas académicos y de investigación, sino también a las condiciones de vida de los trabajadores. "El costo de vida en Tierra del Fuego es muy alto, especialmente con el tema de los alquileres. Muchos docentes y no docentes no tienen vivienda propia, y gran parte de su salario se destina al alquiler", detalló Benítez. La secretaria general hizo hincapié en la precarización de la labor docente, mencionando que las condiciones de enseñanza empeoran, con cursos abarrotados y falta de designaciones de nuevos cargos.
Otro de los puntos de preocupación es el impacto que podrían tener las propuestas de ajuste impulsadas por el gobierno. Benítez advirtió sobre el debate en torno al arancelamiento de estudiantes extranjeros y la posibilidad de que esto sea el preludio de un arancelamiento para los estudiantes argentinos. "Cuando se empieza a hablar de arancelar a extranjeros, el arancel para los argentinos está a un paso", señaló. Además, se refirió a la propuesta de transferir la gestión de las universidades nacionales a las provincias, recordando que una medida similar se aplicó durante el menemismo, lo cual llevó a un deterioro significativo del sistema educativo nacional.
Benítez resaltó que las universidades creadas mediante leyes nacionales requieren de un presupuesto adecuado para garantizar su funcionamiento y evitar la precarización. "Sin financiamiento, descentralizar es un camino al fracaso", afirmó, enfatizando la preocupación por la posible transferencia de responsabilidades a provincias que ya enfrentan desafíos financieros en el manejo de la educación primaria y secundaria.
La situación de la UNTDF refleja una crisis más amplia que afecta a todas las universidades públicas del país. Benítez subrayó que la universidad se encuentra "sobreviviendo", sin posibilidades de realizar proyecciones a futuro o de expandir su oferta académica. A pesar de contar con nuevas carreras aprobadas, la falta de presupuesto impide su implementación. "Nunca nuestra universidad tuvo los presupuestos óptimos, pero ahora la situación se ha agudizado", explicó, apuntando a las decisiones políticas que tienden a ajustar aún más los recursos para el sistema educativo.
Las consecuencias de esta situación no solo se ven reflejadas en la gestión académica, sino también en la calidad de la enseñanza. "Las condiciones de trabajo para los docentes son muy difíciles, y la carga de estudiantes por aula ha aumentado. Esto afecta la calidad de las clases, y la educación universitaria se está resintiendo", agregó.
El futuro inmediato plantea desafíos para la UNTDF y otras universidades públicas. A medida que se acercan las fechas de receso, las universidades deberán continuar afrontando gastos fijos como salarios y servicios básicos, con un presupuesto ajustado. "El rector de nuestra universidad lo dijo claramente: estamos 'prendiendo una vela' para llegar a fin de año", comentó Benítez, quien prevé que el próximo año podría ser aún más complicado, con universidades prácticamente desfinanciadas y sin recursos para mantener la calidad educativa.
La convocatoria a paro y el llamado a la participación de la comunidad universitaria buscan generar un espacio de reflexión sobre la gravedad de las decisiones tomadas y su impacto en el futuro de la educación pública en Argentina. "Creo que aún hay tiempo para tomar conciencia sobre la gravedad de las decisiones que se están tomando", concluyó Benítez, expresando la esperanza de que se logre una mayor unidad y movilización en defensa de la universidad pública y gratuita.
El conflicto en las universidades públicas pone en evidencia la tensión entre la necesidad de un financiamiento adecuado y las políticas de ajuste del gobierno, y promete ser un tema central en la agenda social y política en las próximas semanas.
