RIVER PLATE REVIVE Y SE CONSOLIDA: UNA NUEVA ERA DE TRIUNFOS Y BUEN FÚTBOL
El equipo de Marcelo Gallardo suma puntos clave en la Copa Libertadores y recupera su mejor versión, ilusionando a la hinchada de cara a los desafíos decisivos del semestre.
Con siete unidades sobre nueve en disputa durante sus tres incursiones en Ecuador y Perú, el conjunto de Marcelo Gallardo no solo afianzó su pase a los octavos de final de la Copa Libertadores, sino que también regaló a sus seguidores algo aún más valioso: la certeza de que está resurgiendo en el momento justo. El empate 1-1 entre Universitario e Independiente del Valle fue, indirectamente, la segunda victoria de River este jueves, demostrando que el club gana incluso cuando no está en cancha.
El renacer de un gigante
La contundente victoria ante Barcelona de Guayaquil, dirigido por Segundo Castillo —un técnico que parecía salido de una gala—, reafirmó que River está en pleno proceso de reactivación y consolidación. Tras una seguidilla de empates insípidos que sembraron dudas en el primer tramo del año, el Millonario llega a la etapa decisiva del certamen continental y al tramo final del torneo local con dos virtudes fundamentales: eficacia goleadora y facilidad para sumar triunfos.
La explosión ofensiva: de la sequía al diluvio
El punto de inflexión se dio en La Plata. En los últimos cinco compromisos, comenzando con el 3-0 ante Gimnasia —seguido por dos goles a Independiente del Valle, otros dos a Boca, cuatro a Vélez y tres en el último encuentro—, el equipo acumula 16 conquistas, un promedio de 2,88 por partido. Una cifra abismalmente superior a las 15 anotaciones en los 17 duelos previos, donde el rendimiento era de apenas 0,88 goles por juego. Dos caras de un mismo equipo en un solo semestre.
Eficacia recuperada: menos remates, más aciertos
La mejora en la puntería es abrumadora. Si antes necesitaba 19 intentos para batir al arquero rival, ahora le bastan cinco para festejar. En este resurgir, la figura de Sebastián Driussi ha sido clave, recuperando su mejor nivel tras una adaptación post-MLS más extensa de lo previsto.
Gallardo vuelve a ser Gallardo
Aunque el campeonato local entra en una fase peligrosa —donde un mal día o una definición por penales puede truncar todo—, el equipo retoma su esencia ganadora. Con solo una derrota en 22 presentaciones y un juego en notable ascenso, River vuelve a ser un equipo para creer. El próximo rival, Barracas Central, podría ser más complejo que el de anoche —sobre todo si se confirma la lesión de Driussi—, pero es difícil dudar de un equipo que ha recuperado su mejor versión.
Figuras en ascenso y un técnico que marca la diferencia
Jugadores como Nacho Fernández (recuperado), Facundo Colidio (en racha) y Franco Mastantuono (en un nivel superior) están brillando. Pero, sobre todo, Gallardo parece haber reencontrado su magia. River regresó de Ecuador no solo con el traje de gala que lució Castillo, sino también con el ropaje de candidato a grandes logros en los próximos desafíos.
Con este presente auspicioso, el Millonario no solo sueña con avanzar en la Libertadores, sino también con dejar huella en el torneo local. La hinchada, otra vez, tiene motivos para ilusionarse.
