
Dr. Agustín Perez: «La necesidad era clara, los consumos problemáticos requerían respuesta»
El psiquiatra y referente del nuevo centro de abordaje de consumos problematicos, inaugirado ayer por el Municipio de Río Grande, detalló cómo surgió esta iniciativa, los desafíos que enfrentan y las
El psiquiatra y referente del nuevo centro de abordaje de consumos problematicos, inaugirado ayer por el Municipio de Río Grande, detalló cómo surgió esta iniciativa, los desafíos que enfrentan y las estrategias para abordar el consumo problemático, desde el alcoholismo hasta la ludopatía infantil. Un proyecto que busca no solo tratar, sino también prevenir y concientizar.
El consumo problemático de sustancias y conductas adictivas se ha convertido en una preocupación creciente, Río Grande da un paso adelante con la inauguración del Centro de Abordaje Integral en Consumo Problemático. Este espacio, único en su tipo a nivel municipal, busca ofrecer una respuesta interdisciplinaria a una problemática que afecta a todas las edades y estratos sociales.
El Dr. Agustín Pérez, psiquiatra y uno de los impulsores del proyecto, dialogó con FM la Isla para explicar los detalles de esta iniciativa, que no surgió de la noche a la mañana, sino que es el resultado de años de trabajo y una preocupación compartida por la comunidad y los profesionales de la salud.
EL médico destacó que la idea de crear un centro especializado comenzó a gestarse a fines de 2019, cuando se identificó una falencia en el abordaje público de los consumos problemáticos en la ciudad. «No es sencillo tomar la decisión de abrir una dirección específica para este tema. Es una responsabilidad enorme», explicó. Sin embargo, la necesidad era clara: los consumos problemáticos, desde el alcoholismo hasta la ludopatía, estaban aumentando y requerían una respuesta integral.
Hoy, el centro cuenta con un equipo de más de 26 profesionales, entre psicólogos, psiquiatras, trabajadores sociales, sociólogos y hasta un abogado, que abordan el problema desde múltiples perspectivas. «No se trata solo de lo médico o lo psicológico, sino también de lo social, lo comunitario y lo legal», señaló Pérez.
Uno de los puntos clave que abordó el Dr. Pérez fue la diferencia entre un consumo ocasional y uno problemático. «No es lo mismo tomar alcohol socialmente que ser alcohólico, o probar cocaína una vez que volverse adicto a las sustancias», explicó. El consumo se vuelve problemático cuando comienza a afectar todas las esferas de la vida de una persona: la social, la laboral, la familiar y, por supuesto, la salud.
«El mayor acercamiento que tenemos al dispositivo de salud mental suele ser a través de familiares o amigos. Son ellos quienes notan los cambios en la persona, cuando alguien que era de una manera empieza a ser de otra», agregó. Estas señales de alarma, como cambios de comportamiento, problemas económicos o descuido en las responsabilidades, son indicadores de que el consumo está generando un impacto negativo.
Ludopatía: el nuevo desafío
Uno de los temas que más preocupa en la actualidad es la ludopatía, especialmente en jóvenes y niños. «El juego online es un emergente nuevo, con un impacto mediático importante», señaló Pérez. Aunque las casas de apuestas tienen restricciones para menores, las aplicaciones ilegales permiten el acceso sin control. «El problema es que estas plataformas no verifican datos, y los menores pueden ingresar fácilmente», explicó.
El Dr. Pérez destacó que, aunque el juego en sí no es necesariamente problemático, la ludopatía implica una construcción histórica y un patrón de comportamiento que afecta gravemente la vida de las personas. «No es lo mismo jugar que ser un ludópata», aclaró.
El alcohol: la puerta de entrada
A pesar de la preocupación por las nuevas formas de consumo, el Dr. Pérez fue claro al señalar que el alcohol sigue siendo el principal problema en la región. «Es el consumo más severo que tenemos. Muchas veces se disfraza como algo social, pero es una puerta de entrada a otros consumos», explicó.
Lo más alarmante, según el psiquiatra, es que cada vez hay más chicos que empiezan a consumir alcohol a edades tempranas. «Nuestro cerebro está en pleno crecimiento, y el consumo de alcohol en esa etapa es especialmente peligroso», advirtió.
Mirando al futuro: ¿qué viene?
Ante la pregunta de qué otros consumos problemáticos podrían surgir en el futuro, el Dr. Pérez fue contundente: «Vivimos en una sociedad de consumo, globalizada y acelerada. Todo lo que es novedoso tiende a masificarse rápidamente».
En este sentido, mencionó que los videojuegos y las apuestas dentro de estos juegos ya están generando preocupación. «Hay chicos que están en consumo problemático por los videojuegos, comprando armas o elementos dentro del juego. La tecnología nos está arrastrando a todos, y es difícil predecir qué vendrá después», reflexionó.
Prevención y formación: las claves del éxito
El nuevo centro no solo busca tratar a quienes ya tienen un consumo problemático, sino también trabajar en la prevención y la concientización. «Hicimos una gran contratación de profesionales para trabajar de manera interdisciplinaria y lanzamos un programa de formación para quienes quieran especializarse en el tema», explicó Pérez.
Además, el centro tiene un fuerte enfoque en la prevención del suicidio, uno de los mayores riesgos asociados al consumo problemático. «Cuando hablamos de salud mental y prevención de suicidio, tenemos que trabajar todos estos factores de riesgo», señaló.
Un orgullo para Río Grande
El Dr. Pérez no dudó en destacar el orgullo que siente por el sistema de salud mental de Río Grande. «Es único en el país. No hay otra ciudad donde un municipio tenga tantos dispositivos de salud mental», afirmó.
Con este nuevo centro, Río Grande se posiciona como un referente en el abordaje integral de los consumos problemáticos, ofreciendo esperanza y herramientas a quienes más lo necesitan. Un paso adelante en una problemática que, sin duda, seguirá requiriendo atención y compromiso de toda la sociedad.