
León XIV: Un Pontífice con Alma Latinoamericana para Guiar a la Iglesia
El nuevo Papa, Robert Francis Prevost, elige el nombre de León XIV en honor a la justicia social. Con raíces en Perú y una estrecha relación con Francisco, promete continuar el camino sinodal.
En un cónclave exprés que reflejó un amplio consenso, los cardenales de la Iglesia Católica eligieron como nuevo Sumo Pontífice a Robert Francis Prevost, un religioso de 69 años que adoptó el nombre de León XIV. Nacido en Estados Unidos pero profundamente ligado a América Latina, especialmente a Perú, el flamante Papa llega al solio pontificio con el respaldo de una trayectoria marcada por el servicio pastoral y la sintonía con el legado reformista de su predecesor, el argentino Jorge Bergoglio (Francisco).
Una Identidad Forjada en Perú
Prevost, quien solía decir “Soy peruano. Porque uno no es de donde nace, sino de donde entrega el alma”, vivió en el país andino desde 1985, adoptando incluso su nacionalidad. Como obispo de Chiclayo, se sumergió en las realidades de las comunidades más humildes, ganándose el cariño de los fieles. “Fue en Chiclayo donde empezó a escribir su verdadera historia”, relata una monja que trabajó junto a él. “Allí lo esperaban barrios pobres, rostros cansados, y una fe que resistía. Él respondió con entrega total”.
Su labor no se limitó a lo pastoral: durante su paso por la Conferencia Episcopal Peruana (2018-2023), contribuyó a la estabilidad del país en medio de crisis políticas que derrocaron a varios mandatarios.
Continuidad en la Línea de Francisco
La elección de León XIV –nombre que homenajea a León XIII, autor de la encíclica social Rerum Novarum– confirma la voluntad de mantener el rumbo marcado por Francisco. Prevost fue uno de los colaboradores más cercanos de Bergoglio, primero como prefecto del Dicasterio para los Obispos y luego en reuniones semanales donde analizaban el futuro de la Iglesia.
El arzobispo argentino Marcelo Colombo, presidente de la Conferencia Episcopal, destacó que el nuevo Papa es “una figura comprometida con el camino sinodal, un hombre que acompañó a Francisco en su estilo de escucha y servicio”. En su primer mensaje, León XIV enfatizó la paz, el diálogo y la inclusión, mientras saludaba en español a su “querida diócesis de Chiclayo”.
Desafíos: Sinodalidad, Pobreza y Tensión con los Conservadores
Aunque su rápida elección sugiere unidad, León XIV hereda una Iglesia con fracturas. Los sectores más tradicionalistas resisten las reformas de Francisco, especialmente en temas como la participación de laicos y mujeres, la acogida a migrantes y la transparencia financiera.
Además, deberá decidir si mantiene el alto perfil diplomático de su antecesor en conflictos globales y cómo abordará crisis como los abusos sexuales o la caída de vocaciones sacerdotales.
Un Estilo Propio, pero con los Pobres en el Centro
Quienes lo conocen lo describen como reservado y metódico, pero firme en la opción por los marginados. En línea con Francisco, ha defendido a los migrantes y criticado políticas como las de Donald Trump. “El mal no prevalecerá. Avancemos sin miedo, de la mano de Dios”, dijo en su saludo inicial.
Con un pontificado que promete profundizar la sinodalidad hasta 2028, León XIV parece dispuesto a escribir un nuevo capítulo sin abandonar el espíritu de Bergoglio: una Iglesia “humilde, cercana y servidora de los olvidados”.